Dentro del amplio catálogo de mantas orgánicas utilizado para el control de la erosión en taludes, cárcavas, canales, cunetas y demás pendientes con riesgo de degradación, se encuentra el modelo de mantas orgánicas semilladas.

Las mantas orgánicas semilladas no son productos que se fabriquen para mantenerse en stock a la espera de su venta o comercialización.

Son un tipo de manta orgánica que se fabrica exclusivamente bajo pedido, porque como producto altamente eficiente, debe de responder exactamente a las necesidades de cada caso concreto. Recordemos que la palabra semillada implica manta con semillas, y estas, poseen un poder de germinación concreto.

Características de las mantas orgánicas semilladas

En el proceso de fabricación de mantas orgánicas semilladas confluyen distintos elementos y variantes de los mismos: gramaje de la manta, mezcla de semillas, dosis de las mismas, material base de la manta, etc. Estos son elegidos en función de los objetivos a cumplir y de ahí, que se fabriquen a la carta.

Aunque las hay de diferentes características en función del fabricante, por poner un ejemplo, las mantas orgánicas semilladas fabricadas y comercializadas por Erosionzero, cuentan entre sus características:

  • Están fabricadas sobre una base de fibra natural, pudiendo ser coco, paja, esparto, algodón.
  • Su densidad aproximada se encuentra entre 207 a 332 gramos por metro cuadrado.
  • Cada metro cuadrado de manta contiene una media, según necesidades, de unos 35 gramos de semilla.
  • La capa porta semilla pesa unos 70 gramos por metro cuadrado.
  • Se suministran en rollos 2 de anchura por 40 de longitud.

Estructura de una manta orgánica semillada

Aplicaciones de las mantas orgánicas semilladas

La aplicación de las mantas orgánicas semilladas están especialmente recomendadas en acciones para el control de la erosión en cunetas y cárcavas, taludes y naturación de cubiertas y tejados.

Las cualidades más destacadas de estas mantas orgánicas semilladas son su capacidad de absorción de la energía de la partícula erosiva, sea gota de agua, granizo, nieve o viento; su incidencia en el aumento de la capacidad del suelo de retención de agua con la que evitar la pérdida por evaporación; su efecto de regular la temperatura del suelo al amortiguar la exposición a los ciclos frío y calor; añadir material orgánico en el tiempo gracias a su degradación orgánica, creando más horizonte orgánico; reducen costes de conservación al evitar el aterramiento de cunetas y drenajes; etc.

Las mantas orgánicas semilladas también pueden ser complementos auxiliares en las obras como bordillos, cunetas, encachados, etc.

En su conjunto, permiten lograr un alto nivel de acabado con una plena integración paisajística de la obra, además de ser fáciles de instalar y a un coste reducido.